Vivimos una crisis ambiental que requiere un cambio en todos nosotros. La educación debe ser una estrategia fundamental para propiciar ese cambio, bien sea de manera formal o no formal. El objetivo es crear conciencia ambiental en los ciudadanos desde sus primeros años de vida hasta sus últimas etapas. De ahí la importancia de integrarla a la educación preescolar, primaria, técnica y superior.
La Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA), una autoridad en este tema, define la educación ambiental como un rango de actividades que van desde la conciencia o sensibilización del medio ambiente y sus problemas, pasando por su conocimiento y entendimiento hasta llegar a soluciones reales de los problemas.